Cuando los recién casados decidieron vivir en una nueva casa y fueron a saludar al casero, Murai, antiguo entrenador del club de voleibol, estaba allí para hacerse cargo del negocio familiar…
Marin Momodate (nombre de soltera) tenía amargos recuerdos de su época con Murai cuando era estudiante, e intentaba evitarle en la medida de lo posible, pero cuando dejó Kotobuki y volvió a casa, le vio allí. Su marido, Masashi, fue puesto a dormir, dejando a los dos solos en el espacio.
El director y yo tenemos una antigua relación de amistad sexual, y me acaricia los pechos como algo normal. Marin intenta negarse, pero los acontecimientos del pasado vuelven a ella poco a poco, y Marin no puede olvidar el cuerpo delgado y de mediana edad de Murai.
A medida que se vuelve adicta a cada técnica, sus sentimientos cambiarán gradualmente hacia el orinal femenino de Murai.